Solomillo de pavo relleno de foie con salsa amarga

El día anterior a esta receta, quise sorprender a mi pareja con un almuerzo diferente. Después de un rato, no mucho tiempo, sin calentarme la cabeza, pensé en una receta que podría gustarle bastante. Y dí en el clavo.

Con anterioridad había probado el solomillo de pavo rebozado y me agradó bastante. El sabor no varia del pollo, pero la carne no resulta ser tan seca como ésta. Así que dije: ¿por qué no?, y me adentré en el mundo de la farsa -relleno-.

Los demás ingredientes que necesité para dos personas fueron:

1 solomillo de pavo                   20g de pasas                perejil

100g de Foie                             2 naranjas                     mantequilla

4 patatas medianas                   50g de azúcar              sal

Para comenzar, limpiaremos el solomillo de impurezas -si las trae-, y posteriormente, lo empezaremos a abrir como si fuera un libro y volvemos a abrir cada "lomo" que hemos conseguidos hasta que nos encontremos delante con una "lámina" del solomillo. Lo salpimentamos.

Con el foie lo rellenamos, esparciendo el producto por todo el solomillo abierto. Lo vamos envolviendo por el lado del centro, y una vez enrrollado totalmente, le colocamos unos palillos para que no se abra durante la cocción. Lo metemos en horno, en una bandeja con mantequilla, a 180ºC durante una media hora o 45 minutos. Regamos con un poco de coñac a la media cocción.

Las naranjas las utilizaremos para extraerles el jugo. Ese jugo, lo ponemos al fuego con las pasas y el azúcar. Dejamos que reduzca a fuego lento hasta obtener una especie de jalea gelatinosa y brillante.

Aparte, pondremos a cocer 4 patatas. Una vez cocidas, la enfriaremos, las pelamos y las aderezamos con un poco de sal y perejil.

Una vez pasado el tiempo de cocción, le vamos quitando los palillos uno a uno y cortamos en rodajas -en forma de medallones- el solomillo relleno con el foie y lo colocamos en un plato en situación de escalera. Lo regamos con la "jalea" de naranja amarga. Al lado, acompañaremos el plato con las patatas cocidas, a las cuáles podemos añadirle el jugo que soltó la pechuga con el coñac y la mantequilla. Así sabrán más ricas.

Espero que les haya gustado, a nosotros nos encantó y disfrutemos saboreando este delicioso plato.

Muchas gracias por las visitas y comentarios! Buen provecho!