El frío empieza a aparecer después de haber dejado de lado los días en los que la sombra de los árboles era la gloria.
Las hojas se caen por doquier en cualquier lugar y la vegetación empieza a parecer de novela gótica.
Aparecen los primeros frioleros de la temporada, las primeras setas y la comida pasa a ser algo más diferente y alternativa, al menos bajo mi punto de vista.
Alimentos como los boniatos, las castañas, bellotas, calabazas, granadas, mandarinas y más, empiezan a aparecer y a inundar en todos y cada uno de los supers de todos los barrios; y eso, me encanta!
Me encanta el olor de los boniatos recién horneados, las castañas en el fuego y el abrir gajo a gajo una mandarina. Y por eso, quiero subir una receta que recuerde al otoño como se merece.
El abuelo me trajo del huerto una cesta entera de caquis y claro, me gustan pero no puedo comérmelos todos porque paso más tiempo fuera de casa que dentro. Entonces antes de que tuviera que tirarlos a todos a la basura, pensé: Los haré en mermelada!
Y eso fue lo que hice. Los ingredientes que utilicé fueron:
1 kg de caquis (aproximadamente)
500g de azúcar
Agua de azahar
Después de pelarlos todos y echarlos en un bol, les añadí azúcar, unos gotitas de agua de azahar y lo dejé a fuego lento durante el tiempo necesario; justo cuando al meter la espátula o cuchara, comprobamos que una gota espesa resbala por la superficie. Entonces será ahí cuando esté lista.
Bueno, espero que os haya gustado y que paséis un buen fin de semana!
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